HUERTAS CASERAS CON POCO ESPACIO
Muchas veces pensamos que necesitamos un terreno amplio para crear una huerta casera.
Pero a través de esta guía detallada y súper útil, vamos a contarte cómo cultivar tus propios alimentos en cualquier terraza o balcón que tengas.
Las huertas caseras son una excelente opción para consumir alimentos frescos sin agroquímicos, mejorando nuestra alimentación. Además podemos aprovechar las recomendaciones de especialistas y cultivar siguiendo un ciclo de crecimiento, lo que nos permite incluir a nuestra dieta las hortalizas y leguminosas de cada estación.
Por otro lado, las actividades asociadas a la jardinería y el contacto con la tierra resultan relajantes para nuestro cerebro, nos conecta con la naturaleza y nos ayudan a reducir el estrés diario. El cultivo urbano contribuye al cuidado del medio ambiente ya que disminuye la producción de basura y permite llevar una alimentación más saludable. A su vez, no requiere la inversión de mucho dinero ni de excesivas herramientas o materiales para su realización. Mas bien nos ahorra un monto mensual considerable en nuestros gastos de mercado.
A través de estos pasos y consejos , vas a poder construir sin mayores dificultades alguno de estos estilos:
– Huerta vertical
– Huerta en cajones
– Huerta con palets
– Huerta colgante
– Huerta hidropónica
Huerta vertical
Es ideal para cuando no tenemos suelo disponible y queremos aprovechar la terraza o la cocina, si cuentan con buena luz. Se pueden construir con materiales reciclados como: botellas plásticas, contenedores, tubos de pvc, maderas. Al ser escalonadas podemos ubicar las hortalizas que requieren de más sombra o de más riego en la superficie, para que absorban el agua que cae de las partes superiores. Uno de los consejos más importantes es mezclar arena junto con la tierra y abono, para que puedan drenar correctamente el excedente de agua. También chequear que la pared donde se ubicará la huerta tenga buen aislamiento para evitar la humedad.
Huerta en cajones
Son muy útiles para sitios con mucho sol ya que podemos diagramar la utilización del espacio y colocar techos de media sombra para los cultivos que no soportan el sol directo durante las horas fuertes.
Para su armado se pueden utilizar cajones de madera, como los reciclados de verdulerías, o también de plástico. Para los cajones de madera, debemos cubrir por dentro con lona plástica a la cual se le hacen agujeros para que el agua pueda drenar correctamente.
En este formato, podemos cultivar mucha variedad de hortalizas por la ventaja de controlar la luz y el riego que recibe cada una. Un buen consejo para este estilo de cultivo es utilizar humus de lombriz con sustrato. También colocar plantas aromáticas que ayudan a espantar plagas e insectos.
Huerta con palets
Es una de las opciones más accesibles y económicas para la construcción de huerteros de madera. Para ello, es necesario corroborar que esté bien seco, no tenga partes podridas con bichos y además cubrirlo con una capa de barniz impermeabilizante, ya que va a permanecer a la intemperie y en contacto con la humedad.
Podemos utilizar los palets de manera vertical o con su formato de macetero con ruedas, lo que nos va a permitir cultivar muchos tipos de hortalizas porque la posibilidad de movimiento y traslado en caso de tormenta.
Huerta colgante
Se pueden realizar con botellas, frascos de vidrio, latas, bolsas plásticas. Se adapta muy bien a cultivos que requieren de poco espacio como frutillas, puerros, cebollas, ajos, pimientos, aromáticas- orégano, albahaca, tomillo, cilantro, perejil, etc.-.
Son ideales para ubicar en alguna pared de la cocina o balcón. Para tener al alcance de nuestras manos y poder cocinar platos frescos y deliciosos.
El consejo para estos tipos de huertas, es conservar la humedad correcta y usar compost, arena, sustrato o piedras.
Huerta hidropónica
Este tipo de huertas consiste en cultivar sin suelo, usando el agua como base. Requiere que se le aporte a la planta de todos los nutrientes que no recibe directamente de la tierra. Para ello se pueden utilizar piletas o sistemas de tubos donde circula agua con nutrientes artificiales. Por este motivo los cultivos “flotan” desarrollando una gran cantidad de raíces.
Es un gran recurso porque permite el cultivo interior o exterior, como invernaderos, terrazas, patios cerrados. Así también es una solución para suelos que no son fértiles.
Es un sistema sustentable, casi libre de plagas, que se adecua al ambiente y no depende de condiciones climáticas. Además, permite ahorrar mucha más agua que un cultivo tradicional porque circula y se recicla.